Perojo, 22
Si cuando hablamos de la calle Triana indicamos que era un ensanche a la ciudad inicial, la calle Perojo sería el siguiente ensanche: la consecuencia directa de la expansión tras la decisión de ensanchar la ciudad más allá de sus muros a principios del s.XX, ocupando las huertas que la rodeaban.
En esta calle la burguesía local plasmó en sus fachadas la pujanza económica que vivían, creando una calle multicolor y con variedad de decoraciones.
Fue Laureano Arroyo, arquitecto municipal desde 1888, el encargado de la planificación del ensanche y la construcción de las primeras viviendas, como ésta, de 1904, y que es la segunda que construye en la calle. Esta destaca por su decoración modernista.